En un rincón perdido al norte de la provincia, dentro de la región del Altiplano de Granada, entre los municipios de Puebla de Don Fadrique y Huéscar, crecen algunos de los árboles más sorprendentes que hemos visto nunca: un conjunto de secuoyas gigantes que se reparten en tres localizaciones distintas dentro del Paraje de La Losa, a los pies de la Sierra de La Sagra.
En este artículo práctico te contamos dónde están, cómo visitarlas y algunos consejos basados en nuestra propia experiencia.
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Secuoyas de Huéscar, 3 ubicaciones:
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1. Secuoyas de la Finca La Losa (Cortijo de la Losa)
En esta finca privada, actualmente el alojamiento rural Cortijo de La Losa, se encuentra un grupo de unos 30 ejemplares de secuoya gigante y secuoya roja que impresionan nada más verlos. Alcanzan alturas que rondan los 60 o 70 metros y su porte es realmente imponente.
El acceso es posible mediante visitas guiadas organizadas los domingos por la Asociación Cronos Patrimonio y Cultura de Huéscar. El precio ronda los 10 € por persona, y las visitas se realizan en grupos reducidos.
La reserva se puede gestionar por teléfono en el +34 687 447 009 o por email a cronospatrimonioycultura@gmail.com. Al tratarse de un recinto privado, esta es la única forma de conocerlas.
También puedes reservar la actividad directamente a través de este enlace en el portal vipealo.
2. Secuoya aislada en Finca La Teja
Dentro de la Finca La Teja, también a los pies de La Sagra, se encuentra una secuoya roja aislada que, por su altura y dimensiones, se ha convertido en uno de los árboles más impresionantes que he tenido delante. Solo se puede visitar si te alojas en el Cortijo La Paloma, un alojamiento rural con mucho encanto que hemos tenido la suerte de conocer personalmente.
Desde el propio cortijo, un sendero junto al río Raigadas (en verano un riachuelo, pero en época de lluvias o deshielo puede llevar bastante agua) lleva hasta la secuoya en un paseo muy agradable por el interior de la finca.
3. Bosquete de secuoyas en Finca La Teja
La tercera localización es un pequeño bosquete de unas 10 o 12 secuoyas gigantes, también dentro de la Finca La Teja (Cortijo La Paloma). Se encuentran muy cerca de la carretera A-4301, entre Huéscar y Santiago-Pontones. Normalmente el acceso está cerrado por un vallado, pero este mes de agosto de 2025 se permite la entrada de 10:00 h. a 20:00 h. gracias a una colaboración con Caja Rural.
Se accede por un portillo sin cerrar junto a la carretera, y desde allí puedes pasear tranquilamente bajo estos gigantes. Yo llegué caminando desde el Cortijo La Paloma, en un recorrido de ida y vuelta de unos 3,5 km, ideal para registrar en Wikiloc y compartir con otros senderistas. Eso sí, es importante actuar siempre con respeto y no dañar de ninguna forma los árboles.
Ver esta ubicación en Google Maps.
Breve historia de las secuoyas de La Losa (Granada)
Estas secuoyas no son autóctonas de la Sierra de La Sagra. Se plantaron a finales del siglo XIX, probablemente como parte de un proyecto paisajístico promovido por antiguos propietarios de las fincas, que querían reproducir en la zona el exotismo de especies de gran porte. Con el tiempo, estos árboles se han convertido en un símbolo natural del paraje, e incluso tienen apodo: algunos vecinos los llaman “las Mariantonias”. Hoy están reconocidos como Arboleda Singular de Andalucía.
Recomendaciones para una visita responsable a Las Secuoyas
Si decides visitar las secuoyas por libre, recuerda que muchas de ellas están dentro de fincas privadas, por lo que no se debe acceder si el portillo o el acceso está cerrado.
En cualquier caso, es fundamental respetar este entorno único:
- No dañar los árboles ni sus raíces
- Evitar al máximo el contacto con su corteza, no arrancar hojas ni ramas
- No dejar basura
- No acceder más de 10 personas a la vez
Disfrutar de la experiencia en silencio y con respeto es la mejor forma de garantizar que estas secuoyas sigan impresionando a quienes las visiten en el futuro.